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Propósitos saludables para el año 2014

22 diciembre, 2013

Como cada vez que comienza un nuevo año, todos nos proponemos diferentes retos: algunos en el ámbito personal, otros en el laboral, el amoroso… En nuestro caso queremos proponerte una serie de retos o propósitos saludables que harán mejorar tu calidad de vida notablemente desde el primer día que los pongas en práctica.

Dejar de fumar

Deja de fumar y nota como mejora tu salud

Empecemos con un clásico: “este año dejo de fumar“. Si bien es algo complicado de conseguir, debes plantearte realizarlo con tiempo, no de un día para otro. Un primer paso puede ser ir reduciendo la cantidad de tabaco que consumes cada mes a la mitad de forma gradual y, cuando apenas fumes uno o dos cigarrillos al día, eliminarlos por completo. Dejar de fumar no es algo que todas las personas puedan hacer de un día para otro.

Consumir menos alcohol

Si bien una copa de vino al día es algo muy saludable, el beber alcohol a diario en una cantidad superior a esa es totalmente nocivo para nuestro organismo.

Intenta dejar de tomar ese chupito después de las comidas o el carajillo con el desayuno y reduce la ingesta de alcohol en las cenas fuera de casa o los fines de semana que sales de fiesta.

Reserva las grandes borracheras solo para ocasiones especiales: bodas, fiestas de fin de año… o si puedes ni siquiera para eso.

¡Elimina el alcohol de tu vida!

Haz deporte todos los días

Aunque sea media hora, ni te imaginas la cantidad de beneficios que tiene practicar deporte a diario: desde bajar peso hasta mejorar nuestro sistema circuilatorio y nuestros pulmones hasta reducir el estrés de las largas jornadas de trabajo. ¡Cambia el sofá por el deporte!

Empieza a cenar ligero

No hace falta que empieces a seguir una dieta que te prive de todo lo que comías hasta ahora, pero sí puedes empezar a reducir algunas comidas, como por ejemplo la cena que es la que debe ser más ligera. Empieza a cenar un poco de pollo a la plancha, un par de filetes de pescado a la plancha, verduras, ensaladas y, en general, evita las frituras y alimentos procesados en todas las comidas, pero en especial en la cena.